sábado, 23 de abril de 2011

Un trabajo poco ideal


¿Cuántas veces decimos al día “cómo me gustaría estar durmiendo en casa”? De hecho, se hace viernes y ya suspiramos de alivio: “voy a dormir todo el día”. Bueno, en esta película, dormir es un trabajo. Y no lo digo como algo que cuesta, sino algo por lo que te pagan: un verdadero trabajo. Ideal, no? Bueno, no tanto…prefiero esperar con ganas al viernes a tener que bancarme lo que les pasa a Di Caprio & Co. en “El origen” (para los yanquis, “Inception”).

En una época que tranquilamente podría ser la nuestra, un grupo de personas se dedica a explorar los sueños ajenos en búsqueda de aquellos secretos que no se esconden en cajas fuertes. Sí, así como leen. Para eso, secuestran al soñador, lo drogan y todos se conectan en el mismo sueño. Una vez adentro, comandan el curso onírico y recorren un laberinto ya programado con el fin de llegar a un dato anticipado en la vigilia. Así de loco como leen… Retorcido y todo, esta película está muy buena. Sigan leyendo, les prometo que van a correr a verla.

Dom Cobb ( Leonardo Di Caprio) es un arquitecto que se dedica a navegar los sueños con el fin

de robar ideas que, aplicadas, se traducen en dinero. O sea, si lo queremos poner en términos comunes, sería un ladrón, chorro, ratero o como quieran llamarlo. Para eso, se rodea de un equipo de técnicos que se encargan de dormir a las víctimas y despertar a los soñadores. Es muy útil el método para despertar de los sueños: sensación de caída, infalible. Hay otra posibilidad: morir o ser asesinado en sueños, no tan infalible.

Dom, aparte de ser ladrón de sueños, es un exiliado de su país. Al principio sólo sabemos que su padre le recuerda que no puede volver al país porque lo busca la policía. Más tarde, nos enteramos que en EE.UU está acusado de haber asesinado a su mujer. No cuento el lío que es esa historia, pero sí tengo que contar que en la primera media hora de película, Dom decide dejar este “trabajo” para poder volver a su casa. Para eso, debe hacer un último trabajo, quizás el más difícil. Si la tarea común era “sacar un idea de la cabeza”, este último encargo consistía en “plantar una idea en la mente”. Todos se miran con cara de Juan Carlos Pelotudo, como diciendo “es imposhible, qué me estás pidiendo?”. Pero al final aceptan, ya que la paga, en caso de cumplirse, era alta.

El equipo, que ahora sólo estaba conformado por los personajes de Di Caprio (Dom) y Gordon-Levitt (Arthur), recluta a 3 miembros más: Ariadne (Ellen Page) una joven estudiante de arquitectura, Eames (Tom Hardy) un falsificador de apariencias (sí, eso) y Yusuf ( Dileep Rao) un especialista en alquimia o simil que tiene un poderoso narcótico para hacer el sueño más duradero. A su vez se une al viaje el empleador, Saito (Ken Watanabe), para asegurarse de que están haciendo bien las cosas.

¿La tarea? Convencer al heredero de una importante empresa ("Robert Fischer" interpretado por Cillian Murphy) de no seguir con el negocio de su moribundo padre. Todo se planea minuciosamente, pero a la hora de entrar al sueño de Fischer, aparecen todos los elementos que Freud utilizaría para describir un sueño…Por este motivo, el plan perfecto se despedaza y empiezan a improvisar. Casi que decanta la pregunta, pero ¿cómo no improvisar en un sueño? Ellos, especialistas en sueños, acostumbran a planificar no a improvisar. Pero dentro de estas producciones orníricas se cruzan con unos rudimentarios “mecanismos de defensa” y para colmo, se atraviesa el mismísimo inconsciente de Di Caprio! Y ahí se va todo al carajo…porque lo que Dom no dijo es que el recuerdo de su mujer Mall (Marion Cotillard) lo acecha en sueños y no es precisamente una dulzura de mujer. Así que el completo equipo de soñadores está bajo doble amenaza: las defensas de la víctima y un recuerdo bañado en neurosis de Dom. Y el plus es que si en este sueño morís, en vez de despertar, quedás en estado vegetativo…o loco ¡Corre la envidia!

Esta es una excelente película de suspenso, ya que no sólo te quedás expectante las dos horas y media de duración, sino que ni siquiera podés disfrutar de un final resuelto… Por lo cual, tu cerebro tiene trabajo asegurado.

Llamativamente, no entran en los diálogos los psicólogos, pero sí los arquitectos… En fin, como

nos dejaron afuera del banquete, criticamos el menú jaja. Así que tengo que decir que esta película trata de la locura, más allá de su fachada futurista. Podríamos hablar de los efectos colaterales de un trabajo poco común, pero yo diría que en el centro está el mismo mecanismo: escaparse de la realidad, a un mundo donde lo ideal está al alcance de la mano. Claro que esto es la versión hollywoodense, porque todos hemos experimentado las pesadillas. Retomando, el hecho de recurrir a la fantasía aporta un dato: la realidad es intolerable, hiriente, insufrible…o al menos dista de lo que queremos vivir. Y eso es lo que le pasa a Di Caprio y luego a su mujer. Se tornan una suerte de adictos a la vida de ensueño. Cuando vuelven a la realidad, la mujer sufre un gran conflicto y ya no reconoce como real ese mundo, sino el otro, el de los sueños ¿Y cómo hay que hacer para ir allá? Habrá que salir de ese sueño que no cree real….y cómo les dije que se hacía para salir de los sueños? Con esto, ya tienen media película adentro.

Esta película fue dirigida por Christopher Nolan y fue lanzada al mercado en julio de 2010. Fue nominada a los Oscars y ganó en las categorías "Mejor fotografía", "Mejor edición de sonido", "Mejor sonido" y "Mejores efectos visuales". Sin dudas, es original y creo que ahí está el valor de la peli ¿Qué es retorcida? puede ser ¿Qué es imposible? puede ser. Y creo que el resto de las preguntas que les surjan pueden ser respondidas con un "puede ser", porque Nolan se metió en este mundo de sueños donde todo es posible y dijo "compartamos el hecho de que lo imposible se vuelve real". Creo que, en mi experiencia, lo logró.

La peli llega a un 4 Clarisas pa mi (claro, jaja). Di Caprio nunca fue de mis favoritos en la actuación, y esta no es la excepción...pero bueno, tampoco es tan trágico el hecho que él protagonize. Me gustan más los trabajos de Gordon-Levitt y de Tom Hardy. Pero en sí, no hay ninguno que desentone, porque acá la actuación no es lo central sino que el tema de los efectos especiales cobra mucho protagonismo y le da sentido a la peli. Y respecto a los efectos, son espectaculares, divinos. Ah! y para coronar, una banda sonora que es simplemente ideal. Hace lo que cualquier BSO tendría que hacer: acompañar con justeza cada instante de película musicalizado....y esta sí que lo logra.

Bueno, espero que los haya tentado. Acá les dejo un trailer para que vean un adelanto:


viernes, 15 de abril de 2011

Dos hermanos




Para qué cambiar de título lo que fue nominado con justeza? La película “Dos hermanos” es un film del 2010, dirigido por Daniel Burman y protagonizado por Graciela Borges y Antonio Gasalla. Fue filmada en Argentina y Uruguay, con una fotografía muy interesante.

Susana y Marcos son dos hermanos. Dos hermanos muy distintos, con gran diferencia de edad y viviendo situaciones diferentes. Susana, una agente inmobiliaria que seña departamentos compulsivamente, rayando la estafa. Vive sola en su departamento de Belgrano y es la típica vecina quejosa y malhumorada. Con su madre no tiene relación. Tampoco la tiene con la gente de su familia, a excepción de su hermano.

Marcos vive con su madre, la señora Neneca. Un día, Neneca muere y a Susana no se le ocurre mejor idea que enviar a su hermano a vivir a una casa que compró por error en Villa Laura, Uruguay. Marcos, que es un santo, acepta pasivamente la idea de su hermana…vaya uno a saber por qué. La cuestión es que se muda con sus cosas a Villa Laura, un lugar que desconoce, en una casa frente al río, con vecinos y costumbres nuevas.


Muy sanamente, Marcos logra rehacer su vida en Uruguay, sin su madre, sus amigos, sus familiares, pero con todo un nuevo mundo por conocer. Y no le cuesta tanto. Enseguida se hace de un grupo de pares para jugar al ajedrez, tomar unos tragos y charlar. Así conoce a Mario, un profesor de teatro por el que enseguida se siente atraído. Y tá.

Pero la que empieza a desmoronarse es Susana, quien sigue sola y no logra estabilizar esa imagen de mujer de la alta clase…porque no lo es. Sola, nadie se le acerca y si se acercan los espanta a ladridos. No la quiere nadie, salvo su hermano, que la banca en todas. Le deja pasar los insultos, los maltratos, que lo haya enviado a Uruguay, que le quiera vender la casa, que le robe la plata de venta de la casa materna, que lo minimize…la perdona. Pero todo tiene su límite y Susana lo pisa, resbala y cae. Marcos se va enojado y no vuelve a hablar con ella. Pero así son estos hermanos, no? ¿Y el reencuentro? Vean la película.

“Dos hermanos” logra convertirse en una buena comedia dramática, como si Woody Allen estuviese detrás del guión. Una historia que tranquilamente podría ser contada de forma más visceral, acudiendo a lo negativo del guión, como las traiciones, la muerte, la humillación y el menosprecio. Pero no. Hace de esta relación amor-odio algo digno de hermanos, con sus matices positivos explotados al máximo.

Gasalla es un genio, un capo del humor y no les cabe duda que si él quiere hacerlos reir, se van a reir. No obstante, también lo vi muy bien en sus partes dramáticas. Por lo cual, si yo diese puntajes, el sería un 10+. La Borges es un ícono del cine argentino, con esa voz tan elegante, y ese porte de piernas largas enfundadas en un vestuario encantador, con sus anteojos a lo Audrey Hepburn. Igual, no se duerme en los laureles y le pone la piel a Susana, una de esas personas que no querés invitar a las fiestas. Susana es un cangrejo, porque debajo de esa coraza, hay un sujeto que sufre, sufre muchísimo.

Lo demás es anecdótico, simple decorado. Y la peli para mí llega a los 3 ½ Clarisas. Recomendada para ver un domingo a la tarde, después del almuerzo.

Trailer:

sábado, 2 de abril de 2011

La eterna historia de la gemela malvada



En el comienzo, se contó la historia: una mujer es convertida en un cisne blanco y sólo el amor verdadero la volverá a su forma humana. Habiendo encontrado el amor, su gemela malvada –el cisne negro- se interpone y seduce a su amado. Desesperada y con el corazón roto, el cisne blanco se suicida y encuentra así la anhelada libertad. Y así, encuentra su argumento “El lago de los cisnes”.

“Black swan” (2010) es una película de Darren Aronofsky, protagonizada por Natalie Portman, Mila Kunis y Vincent Cassel. Fue multipremiada en el año pasado, y Portman ganó el Oscar a la mejor actriz protagónica y el Golden Globe en la misma categoría este año.

Thomas Leroy (Cassel) es director de ballet. Este año se propone renovar el alicaído teatro. Para eso, empieza despidiendo a su estrella de ballet - Beth McEntyre- (Winona Ryder), quien está cerca del retiro…y él la acerca definitivamente. Con Beth fuera de la compañía, alguien deberá tomar su lugar. A eso se suma la inventiva de Leroy, quien decide darle un toque de originalidad al clásico “Lago de los cisnes”, haciendo de dos cisnes uno solo. Las postulantes entran en una encarnizada y despiadada lucha por conseguir el papel, y sólo dos de ellas llegarán más allá: Nina y Lily.

En lo que puede haber sido la mejor interpretación de su historia cinematográfica, Natalie Portman encarna a Nina Sayers, una frágil y border bailarina de ballet que le toca cumplir su ansiado sueño: protagonizar por primera vez. El puesto a cubrir? La Reina Cisne y su contraparte, el Cisne Negro. Esa muchacha que es sobreprotegida como una niña, debe encontrar la forma de personificar a su cara oculta, aquella que viene conteniendo desde su infancia. Eso, como pueden imaginar, va a traer consecuencias drásticas.


El espectador tiene la oportunidad de ver una serie de fenómenos que cruzan varias veces el límite de la cordura. El hecho de que yo esté dividiendo en partes el texto, ya nos habla de la desintegración de Nina. Por un lado, la transformación de esa prolija y ultracuidada bailarina, que vive en una burbuja de cristal y que debe convertirse en una mujer en escenario…y no tiene idea de cómo hacerlo. Por el otro, y anexado a esa metamorfosis, la paranoia. Nuevamente la vuelvo a dividir: la erotomanía y la persecuta. Se siente fuertemente atraída hacia su compañera Lily, con quien fantasea tanto que ya no puede distinguir entre realidad y fantasía. Pero ese amor se ve traicionado por las sospechas de que Lily le está haciendo una emboscada para robarle el puesto. Los síntomas, que al principio eran leves, se vuelven espeluznantes. Nina no soporta la presión de su madre, del director y, sobre todo, su propia presión y autoexigencia.

El final ya se los conté, encuéntrenlo.

“Cisne negro” retrata de una forma particular el mundo del ballet. En el fondo, no difiere de otros ámbitos de la vida, porque si recortamos el problema sería algo así: “Competencia, carrera al poder y un extremado individualismo”…mmm, parece poco original. Pero a esto le agregamos las características principales del ballet: cuerpos formados rigurosamente, con un cuidado corporal extralimitado y una disciplina inamovible. Más. Padres exigentes + profesores sobreexigentes: niños con complejos. Otro dato: pasar de ser una bailarina del fondo, a ser la estrella del musical. Y por último, la fecha de vencimiento del cuerpo.

El papel de Nina está exquisitamente construido, y mejor interpretado aún. Aparte del cambio físico (adelgazó mucho), Natalie Portman logra eficazmente convertirse en esa pequeña muchachita frágil como un castillo de naipes, que con el primer viento se desmorona por completo y cuando lo intenta reconstruir lo hace con los materiales que tiene a mano: plumas, talco y lágrimas. Esa estructura tampoco le dura mucho. Los trastornos ya se enquistan en su personalidad, y desde ahí parten esas respuestas tan lejanas a la razón.

De Mila Kunis no tengo mucho que decir. Hace un buen papel, le da cuerpo a la contracara real de Nina. Debo admitir igual que para mí Mila Kunis va a ser siempre Jackie Burkart jaja, así que la sigo viendo como esa nena boba de los 70’s ("That 70's show"), que sólo se preocupaba por su imagen, la popularidad, la música disco y bla bla bla. Lo que en Argentina llamaríamos “una Susanita” (adolescente).

Cassel me encanta, es un actorazo. Adoro la parte que se enoja y empieza a putear en francés...la peli pedía que hable en francés, totalmente.

Redondeando, este gran thriller es un 4 Clarisas. Es muy buena, a veces cae en el lugar común (la chica mala, la chica buena, la madre frustrada, el director inflexible, etc.), pero logra crear un film que engloba la locura y la comparte entre los presentes.

La banda de sonido está compuesta por la reversión de la música original compuesta por Tchaikovsky. El responsable de esta obra tiene nombre y apellido: Clint Mansell. El blog de Jo-Sales nos comparte este link:


"Black swan OST":

Download


01. Nina’s Dream [2:49]

02. Mother Me [1:07]
03. The New Season [2:39]
04. A Room of Her Own [1:56]
05. A New Swan Queen [3:29]
06. Lose Yourself [2:09]
07. Cruel Mistress [3:30]
08. Power, Seduction, Cries [1:43]
09. The Double [2:21]
10. Opposites Attract [3:45]
11. Night of Terror [8:02]
12. Stumbled Beginnings… [3:52]
13. It’s My Time [1:31]
14. A Swan Is Born [1:39]
15. Perfection [5:45]
16. A Swan Song (For Nina) [6:24]

Un tráiler: